Varias veces empezado y solo ahora acabado, la lectura sosegada y vacacional de este libro me ha recordado la excesiva, y muchas veces innecesaria, racionalidad y linealidad de los temas y argumentos que presentamos.
Solo quizá por eso me viene rápidamente a la cabeza la maravillosa e irracional belleza del Guggen que me ha arrebatado este fin de semana.
Y también fluye el imposible Espejo de Tarkovsky.
"Cuando el cine no es documento, es sueño" decía Bergman de él.
Porque posiblemente todos somos un poco sinestésicos.
| ¿Por qué continúan viviendo los traficantes de droga con sus madres? .................... ¿Qué tiene en común un maestro de escuela y un luchador de sumo? ....................... ¿Qué hace perfecto a un padre? |
"Así pues, el objetivo de este libro es explorar el lado oculto de... todas las cosas. Ocasionalmente, esto puede constituir un ejercicio frustrante..."
"Si la moral representa el modo en que nos gustaría que funcionase el mundo y la economía representa cómo funciona éste en realidad, entonces la historia del negocio de rosquillas de Feldman yace en la misma intersección de la moralidad con la economía"
Ver La Teoría de los Sentimientos Morales
de Adam Smith.
"Y ahora, dejando atrás todas estas páginas, se ha confirmado una promesa temprana: este libro efectivamente no posee tema unificado alguno.
Pero aunque Freakonomics carece de tema unificador, al menos existe un hilo común que recorre la aplicación cotidiana de la economía de lo raro"